Persona inigualable en su amor por los animalitos.
Acude puntualmente los días miercoles y sábados, llevando diferentes alimentos y con la paciencia y amor de una madre les da de comer a cada una de las mascotas. Son tantos años haciendo esto, que las mascotas se alinean y esperan pacientemente sin pelearse, la mano generosa que les tiende el alimento.
Además tiene el registro y control de los tratamientos de salud y si alguno de ellos está enfermo lo levanta e inmediatamente lleva al veterinario.
Doblegando su amor y las lágrimas, tiene el valor de acompañar a las mascotas hasta en los momentos más difíciles, cuando hay que afrontar su descanso eterno.
Son innumerables las actitudes de bondad que tiene ella y no solo se ocupa de las mascotas del albergue, también se encarga del tratamiento de salud de varios perritos a domicilio propio, lejos de Trujillo y todo con sus propios recursos
Realmente no he podido encontrar mejor compañera para ocuparnos del albergue, le estoy tan agradecida.